The Oxford Handbook of Religion and Europe ofrece por sus más de ochocientas páginas un dilatado, pero a la vez detallado, estudio del factor religioso en el continente europeo hasta la actualidad. Se trata de un manual cuyo fin primordial es construir, a través de diversidad de hilos analíticos entrecruzados, una red de conocimiento transversal sobre el papel de las religiones y las creencias en este territorio concreto.
Es una obra de referencia por, al menos, dos razones. Por un lado, quizá el principal, pone a la disposición del público lector las claves para comprender el pasado y presente de las religiones en Europa, así como los posibles retos futuros en esta parcela. Administradas estas claves para descifrar el conocimiento sobre la materia, por otro lado fomenta la realización de un ejercicio comparativo, ya no solo entre países, sino también entre religiones e instituciones. Ambas razones en conjunto edifican una comprensión holística del significado de lo religioso y el sistema de creencias en la esfera pública.
A cargo de la edición se encuentran Grace Davie, una de las sociólogas de la religión más reputadas en lengua inglesa, y Lucian N. Leustean, prominente especialista en el estudio del factor religioso en las relaciones internacionales. La obra recoge un total de cuarenta y cinco contribuciones, elaboradas por algunos de los expertos más notables en cada campo. El eje temático sobre el que pivota el libro, como se advierte previamente antes de abrir sus páginas, es el fenómeno religioso en el territorio europeo. Son los propios editores quienes inauguran el libro con un capítulo introductorio que explora los fundamentos que sostienen este conjunto de investigaciones. Lo consiguen a través de una rigurosa exposición de las teorías y enfoques sobre la significación de las creencias religiosas en Europa.
Debido a la complejidad del tema, su transversalidad, y a su propia amplitud, el libro se agrupa en cinco equilibradas secciones. La primera de todas relaciona el transcurso histórico de Europa con el factor religioso como piedra angular en su desarrollo. La segunda se preocupa del diálogo entre religión y modernidad en torno a grandes temas como las dictaduras, las relaciones Iglesia-Estado o el proceso secularizador. Para comprender cómo las instituciones y la legislación han abordado y abordan las religiones en la esfera pública, la sección tercera aglutina las políticas de varios organismos sobre asuntos religiosos. Continuando, la cuarta tiene como nota principal atestiguar la pluralidad religiosa en el continente, a través del análisis de las creencias y su desarrollo. Por último, desde una mirada transnacional a nivel europeo, el libro se cierra con una sección más extensa que dirige una mirada particular y “territorializada” con el fin de conocer el papel religioso en países concretos.
Complementarios a las contribuciones que conforman la obra, otros recursos útiles se ponen a disposición de los lectores con el objetivo de facilitar la comprensión y ayudar a ilustrar la teoría expuesta en los diferentes bloques. Entre ellos se encuentra una cronología con hitos religiosos, que parte desde los primeros enterramientos neandertales del sureste europeo hasta el año 2020, con la publicación de la encíclica papal Fratelli tutti. También se inserta un mapa mediante el que se comprende visualmente qué religión es mayoritaria según los países en la actualidad. Es particularmente eficaz ya que la lectura de los capítulos en ocasiones solicita conocer qué religión es mayoritaria en un país determinado y cuál es la de sus países vecinos. Cerrando el libro, otros dos recursos proporcionan un estado detallado de las religiones: un resumen estadístico del porcentaje de población que profesa las religiones más mayoritarias, y otro que relaciona demografía y condición religiosa por países europeos y en ciertas zonas periféricas al continente.
Por mencionar alguno de los numerosos aspectos abordados, una constante que se advierte a lo largo de la obra y actúa como pivote de muchas de las contribuciones es la atención al proceso de secularización. En contra del imaginario colectivo, si bien la secularización y la tendencia a la laicidad de los países europeos es nota predominante de la Edad Contemporánea, el hecho religioso actualmente sigue ocupando un rol significativo en la vida pública como fuerza política. Las religiones y su diálogo con el Estado, confrontado o amable, son claves para comprender los debates públicos actuales e incluso las dinámicas geopolíticas. Por consiguiente, el resultado del libro ayuda a la conceptualización y ubicación de las religiones y del proceso secularizador.
Es relevante destacar que la obra no solo recoge la situación actual, sino que también se le concede relevancia al examen del pasado para conocer la genealogía de las religiones en el territorio. En efecto, la historia se postula como herramienta para comprender la actualidad y para hacer balance sobre en qué medida las religiones han determinado la conformación de estructuras ideológicas, institucionales o, incluso, territoriales.
Es, con todo, una propuesta para el aprendizaje del papel del fenómeno religioso en la construcción del continente europeo. Aunque es un tema amplísimo, es abordado en mucha de sus ramas, aportándose en su conjunto una síntesis al estudio de las religiones en el continente. La obra ofrece, de esta manera, los módulos y líneas directrices para comprender el papel de la religión en la construcción de las sociedades pasadas y presentes. Al abrir camino metodológico de estos senderos que llevan a comprender el hecho religioso, se consigue que el lector o lectora se adentre en ellos, perciba los matices y suscite el interés por otros que no aparecen en detalle.
El formato del libro está dirigido a un amplio grupo lector: desde quienes aspiran a conocer y formarse sobre este tema, hasta quienes desean concretar una búsqueda específica que encontrarán en la gran variedad de contribuciones. Ahora bien, quizá sea especialmente útil para el estudiantado universitario o personal investigador que necesite un primer acercamiento al tema para reflejarlo en otras investigaciones que requieran conocer la situación del hecho religioso.
En definitiva, el libro es resultado de un esfuerzo colectivo por presentar el estado del sistema de creencias y religiones en el continente europeo a través de un recorrido histórico hasta la actualidad. Cuenta para ello con un adecuado balance de aportación teórica, investigación y análisis de la mano de sobresalientes especialistas. Consolida un referente de consulta para el tema y abre otros interrogantes sobre el futuro de la religión en Europa: tanto su presencia como ausencia, pero también retos como el pluralismo religioso y la tolerancia de la diversidad.
